El hangar Buildair H75 es una estructura inflable fabricada en tela de fibra recubierta de PVC, que se ancla al terreno y está alimentada continuamente por motores de inflado. Cuenta con 75 metros de tamaño luz interior y 33 metros de altura.
Cuando aterrizamos o despegamos de un gran aeropuerto, vemos unos edificios de gran tamaño, sin apenas ventanas y en muchos casos destartalados. Hablamos de los hangares, los espacios cubiertos donde se realizan labores de mantenimiento sobre los aviones, se revisan sus condiciones de seguridad y se hacen mejoras o repintan las aeronaves.
Sin embargo, los hangares al uso no son ya una opción muy eficiente, por lo que ha surgido un nuevo concepto de estructuras hinchables. Gracias a estos modelos podemos obtener un acortamiento de los tiempos de entrega, que van de uno a seis meses, además de no requerir solicitud de permiso alguno.
Consideradas equipamientos y no edificaciones, estas estructuras pueden ser instaladas sin necesidad de solicitar permisos de construcción, por lo que se agilizan los trámites. Son totalmente desmontables y transportables en contenedores estándar, no ocasionan daños estructurales al ser instaladas y requieren un nivel de inversión muy bajo si se comparan con instalaciones fijas tradicionales.
Y si hablamos de hangares hinchables, el récord está en manos de una empresa española. Es, en concreto, el Buildair H75, desarrollado por el Centro Internacional de Métodos Numéricos en Ingeniería (CIMNE), vinculado a la Universidad Politécnica de Cataluña.
El hangar Buildair H75 es una estructura inflable fabricada en tela de fibra recubierta de PVC, que se ancla al terreno y está alimentada continuamente por motores de inflado. Con 75 metros de tamaño luz interior y 33 metros de altura, Buildair H75 bate el récord mundial de hangares inflables para el mantenimiento de aeronaves, ostentado hasta la fecha por el Buildair H54, de 54 metros de tamaño luz, que se encuentra en las instalaciones de Airbus en Getafe (Madrid, España).
El Buildair H75, que cuenta con tubos de 8 metros de diámetro, está diseñado y construido siguiendo la normativa encargada de regular este tipo de estructuras (UNE-EN 13782:2016) y el Eurocódigo que controla la resistencia de la carga de viento. El hangar soporta ráfagas de viento de hasta 120km/h, resistencia equivalente a la de un edificio fijo tradicional. Además, las dimensiones del H75 permiten albergar aeronaves wide body como el Airbus A330 o el Boeing B777, así como cualquier aeronave de igual o menor tamaño.